Caminar por las calles y caminos es una experiencia vital para el ser humano. Pero además, con una cámara de fotos en la mano, caminar puede convertirse en una práctica política.
«Entre los diversos procedimientos situacionistas, la deriva se presenta como una técnica de paso ininterrumpido a través de ambientes diversos. El concepto de deriva está ligado indisolublemente al reconocimiento de efectos de naturaleza psicogeográfica, y a la afirmación de un comportamiento lúdico-constructivo, lo que la opone en todos los aspectos a las nociones clásicas de viaje y de paseo».
(Guy Debord)